lunes, 15 de febrero de 2010

Lectura recomendada: 2001, una odisea del espacio, de Arthur C. Clarke


Sin duda alguna, Kubrick hizo con esta película una obra maestra, tanto en el terreno de lo visual como por la repercusión que tuvo un film de estas características en la época (finales de los sesenta). Con una banda sonora espectacular en la que clásicos de Richard Strauss, Johann Strauss y Ligeti dan fuerza a la película, al verla no puedes dejar de sentir cierta incomodidad por la cantidad de detalles que quedan en el aire.
Así que, para rellenar huecos, no he hecho nada mejor que leerme el libro, una obra maestra de la ciencia ficción con mayúsculas. Todo queda cuadrado, todo tiene sentido, el monolito tiene su razón de ser, al igual que tiene sentido que HAL se volviera "loco" o que Bowman se transformara al final en el niño de las estrellas.
Sin duda lo mejor de todo es el rigor científico que Clarke imprime a toda la obra, dando detalles técnicos de la nave, explicando las razones por las cuales no se podría viajar a otras galaxias, cómo se comporta un cuerpo que está expuesto al vacío, y un sinfín de detalles que le dan vida y credibilidad a este libro imprescindible.
Una vez leído el libro me ratifico: la película es sólo para los fans, para los que ya han disfrutado con la lectura. Todo lo que creas entender en ella sin el libro no son más que conjeturas.
Algo similar ocurre con Watchmen, de Alan Moore. Sin el cómic, la película no deja de ser un extraño experimento.

sábado, 13 de febrero de 2010

El Cascanueces de Tchaikovsky



Hace más o menos un mes que vi a un ballet ruso en el teatro infanta Leonor de Jaén interpretando esta magistral obra en la que Tchaikovsky puso música a finales del s.XIX a la versión que hizo Alejandro Dumas sobre el cuento "El cascanueces y el rey de los ratones", de Hoffmann.
Como no quiero aburrir demasiado contando la historia, mejor disfrutar de esta música maravillosa aderezada con la plasticidad de los bailarines.
Me duelen los tobillos de ver a la chica.
Y el dedo gordo del pie también.

viernes, 12 de febrero de 2010

Tertulia literaria con el club de lectura


Hace mucho tiempo que quiero hablar de estos chicos estupendos que están apuntados al club de lectura del IES Jándula, un magnífico proyecto que llevan a cabo mis amigos Mari Carmen Rodríguez y Jesús Vera.
Después de haberse leído unas cuantas historias de "Fobos", esta semana me he reunido con ellos para contarles algunas cositas y, sobre todo, para dejar que me interrogaran a placer.
Como siempre que participo en este tipo de charlas, no me han defraudado con sus preguntas, directas, incisivas, mordientes, perspicaces. Por fortuna son pocas las preguntas acerca de Fobos que a estas alturas me pueden sacar los colores (a base de palos cariñosos aprende uno).
Un abrazo a todos. Si creéis que es algo especial reunirse y charlar con el autor de un libro que acabáis de leer, os tengo que llevar la contraria: sin duda alguna, habéis sido lo más especial de aquella reunión.

lunes, 8 de febrero de 2010

¿Evolución o nadar contra la corriente?

Me encuentro hoy al leer el maravilloso blog de mi amiga Mery, una entrada basada en una polémica frase de Moliere:
"La gran ambición de las mujeres es inspirar amor".
...
Minuto de silencio.
...
Reflexión.
...
Me gustaría contrarrestrar con otra frase demoledora e igualmente polémica:

"La mayor ambición de un hombre es esparcir su semilla tanto como pueda".

(No sé si la frase tiene dueño. Sólo sé que hace tiempo la estuve discutiendo con mi amigo Miguel Angel, así que si no tiene dueño, se la adjudico a él).
...
Minuto de silencio.
...
Reflexión.
Sí que es verdad que las mujeres son coquetas, y también se oye por ahí decir que los tíos somos infieles, pero si se mira con cierta perspectiva, ser promiscuo es una característica típica y natural de los machos de casi todas las especies animales.
De cualquier forma, me resulta harto chocante decir que "LA GRAN AMBICIÓN de las mujeres es inspirar amor", pues no creo que todas las mujeres ambicionen eso por encima de todas las cosas. Mi pregunta es: ¿No lo ambicionan porque en la evolución natural hemos nadado contra corriente y nos hemos alejado de nuestra genética animal?
Lo mismo nos pasa a los chicos. ¿Somos monógamos porque vivimos en una sociedad monógama?
Ánimo, valientes. A ver quién se atreve a opinar.
Cuidado si eres hombre: digas lo que digas, será malo.