sábado, 31 de marzo de 2012

PROMETER HASTA METER

"Prometo, prometo, hasta que te la meto. Y cuando te la he metido, retirado queda lo prometido". 
Así actúa nuestra clase política. Como un chulo de veinticinco años que se quiere ligar a una niñata de catorce. Ni que decir tiene que la niñata de catorce somos nosotros, los que votamos, los que creemos, los títeres necesarios para que la función pueda representarse.
Es absolutamente increíble la inmunidad de nuestros dirigentes, amparados por unas leyes que blindan de cualquier responsabilidad todas sus licencias, todos sus deslices, todas sus mentiras. Si a un ciudadano lo seducen con una promesa electoral, y esa promesa no se cumple, ¿por qué hemos de seguir amarrados a algo que no es lo que en su día se quiso? ¿Por qué no pueden rodar las cabezas, como ocurriría en cualquier otro entorno/empresa/lugar? Si contrato una línea de teléfono que me promete 10 mb reales, y al mes descubro que no paso de 1 mb, mando a la compañía a la puñetera mierda y me quedo tan tranquilo.
Nos tienen comidos el seso. Nos faltan al respeto y creemos que los castigamos pasándonos al rival, que también nos falta al respeto obligándonos a volver al punto de partida (una vez pasados ocho años, suficientes para que el tiempo haya actuado como bálsamo de nuestro enfado original).
Y ahí estamos, atrapados en una alternancia política que ha creado una nueva clase social encubierta, una puerta que muchos ven de acceso de la clase media a la clase alta.
Exijo desde ya responsabilidades penales a nuestra clase política. Si algo se hace mal, no lo hace un partido: lo hace una persona. Si un decreto es injusto y perjudica a mucha gente, el error no ha de ser achacable al Ministerio de turno, ni a la Consejería tal, sino a la persona que ha firmado esa ley. 
Os dejo dos vídeos del 2010, muestra clara de la falta de coherencia que existe en el discurso de nuestros líderes, y prueba inequívoca de que seguimos dando palos de ciego. Saldremos o no de esta crisis, pero no será porque las ideas estén claras.
En este primero, Rajoy rechaza tajantemente una medida que ayer mismo se aprobó:





En este segundo vídeo, Soraya es poseída por algún sindicalista o en su defecto miembro del partido socialista.


Propongo una nueva medida de recorte de gasto para la Moncloa: no compréis papel higiénico y limpiaros el culo con las páginas de nuestra pobre y mancillada Constitución, que para qué nos sirve una vez que os la habéis cargado. En su primer artículo dice "la soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del estado". La Merkel, los rusos y los chinos se descojonan con esto.

martes, 27 de marzo de 2012

EL PIANISTA, DE ROMAN POLANSKI: SHAKESPEARE Y CHOPIN PARA CURAR LAS HERIDAS

Mis alumnos no habían oído hablar del Holocausto judío, y de Hitler sólo sabían que había sido alguien muy malo (vamos, estaba a la altura Darth Vader y Zapatero)
Saltándome todo lo saltable y dando ejemplo de mala praxis, he pensado que para acabar el trimestre podía recompensar sus esfuerzos y buenos resultados poniéndoles una película que nada tenía que ver con nuestra materia. Teniendo para elegir "La vida es Bella", "La lista de Schindler" o "El pianista", finalmente me he decantado por esta última  por la belleza que esconde dentro de la propia crudeza. Otro factor importante para elegirla es que me recuerda mucho a uno de mis novelas gráficas favoritas: "Maus", de Art Spiegelman.
Como era de esperar, la película los ha absorbido, y lo que ha comenzado siendo horror ajeno (el horror que se siente al ver ficción) poco a poco se ha ido transformando en angustia real a medida que han ido tomando conciencia del carácter casi documental del film.
Por ahora ya tienen nociones de lo que ocurrió, y con esto me conformo. Para otro día, pretendo aprovechar el impacto causado para colarles a Chopin y a Shakespeare.
Este monólogo lo recita Shylock en "El mercader de Venecia", de W. Shakespeare:
“Soy un judío”. ¿Es que un judío no tiene ojos? ¿Es que un judío no tiene manos, órganos, proporciones, sentidos, afectos, pasiones? ¿Es que no se alimenta de la misma comida, herido por las mismas armas, sujeto a las mismas enfermedades, curado por los mismos medios, calentado y enfriado por el mismo verano y por el mismo invierno que un cristiano? Si nos pincháis, ¿no sangramos? Si nos haceis cosquillas, ¿no nos reímos?, Si nos envenenáis, ¿no nos morimos? Y si nos ultrajáis, ¿no nos vengaremos?"
En la película, cita el hermano del protagonista con un libro en la mano, estando a la espera de uno de los trenes de la muerte y cambiando las preguntas por afirmaciones, lo cual denota pérdida de toda esperanza:
"Si nos pincháis, no sangramos
 Si nos haceis cosquillas, no nos reímos, 
Si nos envenenáis, no nos morimos
Y si nos ultrajáis, no nos vengaremos"
En un momento clave, mucho más avanzada la película, un oficial alemán obliga a tocar a Szpilman (a propósito, es un personaje real, y la película está basada en su libro de memorias). Tras varios años sin hacerlo y al límite de sus fuerzas, el pianista se atreve con la Balada nº1 Op.23 en sol menor, de Chopin. 
Y si suena Chopin, yo callo.

domingo, 18 de marzo de 2012

TABERNA EL MENEÍTO (2012)

Sin duda alguna, el equipo campeón de la liga 2010 es el que tiene más media de edad de la liga. 
Nueva equipación, algunos nuevos componentes, y muchas ganas de estirar nuestra jubilación futbolística.
Diez minutos después de hacer esta foto, el viejales que esto escribe sufrió una lesión muscular de escasa importancia.
Fila arriba: Manolo A., Javi Chamorro, Adrián, Amador, Miguel
Fila abajo: Rubén, Pablo, Jaime, Vicente, A.Ballesteros
Y faltan unos cuantos.

viernes, 9 de marzo de 2012

GOBIERNO DEL PUEBLO, POR EL "PUEBLO", PERO NO PARA EL PUEBLO

Esto pinta cada vez peor. Siento seguir en esta línea pesimista, pero por mucho que me digan que todo lo que se hace es imprescindible para salir de la crisis, yo no puedo dejar de pensar que dar una serie de pasos en falso ahora puede conseguir que ese estado de bienestar por el que tanto han luchado nuestros padres se convierta en un feudalismo encubierto con el que habrían de penar nuestros hijos. 
Y es que no veo claridad política. No percibo espíritu de mejora. Esto sigue siendo un, y perdónenme la infantil referencia homófoba, "marica el último". A los parlamentarios con piso en Madrid les piden que tengan el gesto de renunciar a su "legítima" dieta por alojamiento, y los de PP y PSOE dicen que no. Dinerito, dinerito.
Nada bueno puedo esperar de un gobierno que cada vez toma más poder, un gobierno de clara ideología de derechas (parece que esta España durmiente ya ha olvidado qué es eso de la derecha). Leo las declaraciones de Esperanza Aguirre y ya ni siquieran tienen tufillo a totalitarismo: es que son claramente despóticas y propias de un noble medieval. Después de hacer alarde de ignorancia doquiera que hable, ninguneando a interinos (exactamente dijo que no habían aprobado oposiciones y entraban a dedo), abriendo la puerta a la privatización de la enseñanza, idem para la sanidad, y después de un millón de despropósitos políticos que ya habrían costado la cabeza de cualquiera que no llevara en su apellido el título de condesa y noble de España, ahora se atreve con el aborto (otro de estos temas calentitos que la sociedad ya habría asimilado y superado de no ser por la siempre molesta intervención de la moral eclesiástica), afirmando literalmente que "el aborto no es un derecho, sino un fracaso de la mujer en todos los supuestos".
O sea, si yo no me he vuelto imbécil de ayer a hoy (que todo es posible), y teniendo en cuenta los tres supuestos en los que el aborto está despenalizado, según la afirmación de Aguirre yo entiendo:
a) Si la mujer es violada, entonces se trata de un fracaso de la mujer.
b) Si el feto sufre malformación física o psíquica, entonces se trata de un fracaso de la mujer.
c) Si el embarazo supone un riesgo grave para la salud de la mujer, entonces se trata de un fracaso de la mujer.
En serio, no quiero ser gobernado por la nobleza. Los nobles, desde que el mundo es mundo, han obtenido riqueza a costa de sus vasallos. Tú te deslomas y yo, con el poder que me otorga mi cargo, te protejo. Lo que teníamos hasta ahora no les podía interesar... ¡un mundo lleno de ricos, por favor! La gente tiene que seguir en el barro, porque desde el barro es difícil llegar caminando al castillo. 
Venga, vamos, dejemos que se privatice la enseñanza, que se privatice la sanidad, que el Estado (nosotros) no pague nada, sólo las medallitas concedidas al ejecutivo saliente por "beneficiar a la nación". Me atraganto con esto, coño. Se va Zapatero del gobierno sin haber tenido los santos cojones de aprender inglés (por citar algo) y le dan el puñetero Collar de la Orden de Isabel la Católica. Y a una madre que saca cuatro hijos adelante, que aprueba dos oposiciones sin plaza después de cinco años de licenciatura, un máster y mil cursillos, que viaja durante quince años una media de 100 km para ir a trabajar, que paga 500 euros de hipoteca con suelo y ve sobrevolar continuamente la sombra del embargo, que aguanta que le digan que ha sido colocada a dedo, y que encima es violada después de salir de la primera quedada con los amigos que ha tenido en los últimos doce años... ¡a esta madre le dan la medalla a la mujer fracasada!
Se puede salir de esto, pero antes tienen que rodar cabezas. De lo contrario, no nos dejarán salir del barro: no les interesa. Miremos a los miembros del ayuntamiento de Torrelodones, que han conseguido la alcaldía con un grupo de "gentes del pueblo", liberados de ideologías políticas, que con ganas y buen hacer han logrado superávit en estos difíciles tiempos de corren. ¿Que cómo lo han hecho? No, no han recibido más pasta que otros. Simplemente se han recortado el sueldo, han minimizado gastos, han prescindido de los "cargos políticos de confianza" nombrados por anteriores legislaturas (en estas tierras se llaman enchufados. Escarbas un poquito y aparecen cientos), han dejado de alquilar coches oficiales y sus respectivos chóferes... Todo un alarde de huevos gracias a lo cual sus proveedores cobran al momento. Y como bien sabemos, si los proveedores cobran, el dinero se mueve. Y si el dinero se mueve, esto marcha.
Espero que esta mi visión catastrofista de los acontecimientos se quede sólo en eso. Espero dejar de sentirme como el gran jefe Seattle cuando escribió su carta a Franklin Pierce, presidente de los Estados Unidos, obligado a "vender" su tierra: "enseñen a sus hijos que nosotros hemos enseñado a los nuestros que la tierra es nuestra madre. Todo cuanto ocurra a la tierra ocurrirá a los hijos de la tierra". Espero no tener que contarles a los míos que cuarenta años atrás pudimos aprender y leer libremente y que la gente no moría por no poder pagarse una operación. 
Me moriría de la vergüenza, por haber estado allí... y no haber hecho nada.