jueves, 27 de enero de 2011

40 DE ACERTIJOS

Mi compañero Pedro Jurado (padre), a quien mando un cordial saludo desde aquí, sacó a relucir el otro día en una reunión un viejo acertijo como éste:

Hay que meter 9 bolas en 4 cajas, debiéndose verificar que cada caja ha de tener un número impar de bolas, y además cada caja debe tener un número diferente de bolas.

Las bolas son de adamantium y no se pueden partir, a no ser que se posea un citoesqueleto del citado material, o bien se llame uno Zapatero y decrete por ley que las bolas han de partirse.

Nada más por hoy.
Sigo con la corrección, que ya queda menos.
Pronto el sol saldrá por el oeste.
¿No tenéis ya ganas?

martes, 18 de enero de 2011

CALENTANDO MOTORES PARA OLIMPIA

Empieza a estar todo dispuesto para empezar la edición de mi tercer libro, "El latido de Olimpia". Después de pensármelo bastante, creo que voy a volver a lanzarme a la aventura con una tirada pequeña que satisfaga al puñado de incondicionales que me la están pidiendo.


Todavía hay muchas incógnitas en el aire. No sé si incluir índice de personajes, aunque lo más probable es que sí lo haga. No sé si las ilustraciones irán en blanco y negro o a color. Tampoco sé aún cómo afrontar ese primer capítulo, el relato de Fobos "El observador". Si lo ajusto al resto de la novela, tendré que versionarlo para cambiar el estilo narrativo. Esta opción no me hace demasiada gracia, así que cada vez más cobra fuerza la idea de dejarlo tal cual está e incluirlo como un capítulo prólogo precedido de una nota de autor que explique su origen.
Lo que sí está claro es que la corrección está a punto de acabar, y en cuanto esto ocurra empezaremos con la maquetación.
¿Qué me decís de la ilustración? En esta ocasión es obra de la artista Mar Cantón, cuyo blog no podéis dejar de visitar.

Y hablando de artistas e ilustraciones, una de las futuras ilustraciones de Olimpia, "Caronte, el barquero", de la genial Concha Gómez, está siendo utilizada en la página web del grupo de teatro La Redondilla, a los que mando un cordial saludo desde aquí (abajo a la derecha aparece la autoría del dibujo y un intento por poner mi nombre que se ha quedado en siglas).

Como siempre poco antes de publicar, empiezo a sentir el gusanillo.
...y los nervios, joder.

domingo, 9 de enero de 2011

PAPEL A PRECIO DE JAMÓN

Hablaba ayer con mi hermana Encarni acerca de cómo se podía medir el grosor de un folio de papel sin más herramienta que una simple regla. El problema está en que un folio es demasiado fino para realizar una medición, así que le dije que yo solía decirles a los alumnos que emplearan su ingenio, que midieran un taco de quinientos folios, pasaran a milímetros, y luego dividieran entre 500.
Ella se rió y me contó que una vez tuvo una trifulca en una carnicería. Le pidió al carnicero que le pesara la carne sin el papel, y éste le dijo que no podía hacerlo porque entonces mancharía la báscula. Entonces ella le dijo que pesara el papel y restara el peso, a lo que el carnicero alegó que el peso del papel era imperceptible, y que la balanza no lo detectaba siquiera.
En definitiva, un trozo de papel que apenas pesa...
...mientras que si se hubiese pesado todo el rollo del papel, lo más probable es que el peso total hubiese superado el par de kilos.
De manera imperceptible, pero siempre hemos comprado papel a precio de chuletas de lomo, jamón ibérico, cordero lechal..., y los charcuteros y carniceros venden papel barato a precio de manjar.
¿Y qué le vamos a hacer?

Ya que hablamos de precios...
¿Alguien se ha parado alguna vez a calcular que si 120 g de Lays cuestan 1,20 euros en el supermercado (precio orientativo), entonces el kilo de patata frita nos está saliendo a 10 euros?
¡Coño, a precio de jamón! (o tal vez la patata esté a precio de patata, y paguemos el envoltorio a precio de trufa, que todo es posible).

miércoles, 5 de enero de 2011

PATADAS EN EL ESTÓMAGO 10, 11, 12 Y PIERDO LA CUENTA

El foro para hablar acerca de la ley antitabaco sigue abierto, así que los fumadores podéis seguir criticando la ley, los no fumadores increpando a los fumadores y todos a por mí por intentar moderar.
Mientras tanto, aprovecho el nuevo año para continuar con mi particular cruzada (aunque ya no tan particular, pues los chicos del Club de Lectura del IES Jándula se han sumado a la causa) contra las extremas  patadas en el estómago.
Y es que ya no nos libramos de ellas ni en los artículos científicos:
¿Existirá la neurapraxia cerebral?  Como Juan Manuel de Prada conozca esta palabra, nos podemos olvidar de encontrar en sus libros el verbo dormir.
 -Hay que ver, hija mía -dijo la Choni-. En cuanto me relajo un poco empiezo a sufrir de neurapraxia metacarpial inferior.
 -A mí me pasa mucho y se me quita rezando tres avemarías.

 Si de pies hablamos, entonces lo mejor es consultar la prensa futbolera. Alguien ha debido pensar que si "tentempié" lleva tilde, quitándole el "tentem" la regla poco iba a variar. Pues no, amigos. Nuestro querido pie no la lleva ni la llevará hasta que los señores académicos decidan que sí, que a la y se la llame ye, a la w wei, a la x eks, a la f fe y al pie se le ponga su tilde para que nadie más critique a los redactores de la prensa deportiva.

  

 A veces las patadas vienen producidas por errores. No pasa nada. Todos somos humanos. Todos damos pataditas (menos Juan Manuel de Prada, claro) y todos somos criticables. Pero, por favor, al menos vamos a copiar bien. Es ésta una lucha incesante con los alumnos de la ESO. 
Si el libro se titula "¿Por qué se cayó todo...?", y hay imágenes que así lo demuestran... ¿por qué copian mal? ¿Cómo se sentirá el pobre Juan Torres cuando vea que el libro al que tantas revisiones ortográficas ha hecho está vilmente mancillado por el primero que se ha atrevido a mencionarlo?


Y mejor no me quejo mucho, que aún tengo fresco el recuerdo de la publicación de mi primer libro. Alguien filtró a la prensa local la noticia de la presentación, y apareció en la agenda online del ayuntamiento la noticia de que un tal Miguel Amaro iba a publicar su primer libro...
Puestos a quejarnos, no se libra ni el que transcribe las leyes. Esta noticia es de las que duelen. Espero que ahora no me diga nadie algo así como "te van a quitar Muface para distraerte la atención mientras hacen otras cacicadas tipo quitarnos el humo o bajarnos el sueldo". Soy capaz de acumular problemas. ¿Vosotros no?


  Y acabo con la tele, esa maravillosa caja cada día más tonta. No sé cómo capté esta imagen, pero la capté (tampoco sé qué diablos hacía viendo telecinco).


No tuve tanta suerte con la cámara el día en el que en en la información meteorológica aparecían poblaciones con 5 de mínima y 3 de máxima. ¡Cachis!
Tarea nos queda a los profes. Y gorda.
Y zancadillas que recibir, y costras que quitarnos.
Que los Reyes Magos se porten bien con todos vosotros.

domingo, 2 de enero de 2011

Y VIVÍ PARA VERLO

Cuando estrenaron la primera parte de El señor de los anillos, me dije: mira que si la casco ahora, con las ganas que tengo de ver las otras partes. Pues sí, mi vida es así de profunda. Me voy dando cuenta de si estoy vivo o no por pequeños detalles diarios.
Llevo meses pensando en el 2 de enero con cierto pesimismo. Y es que vivimos en España, y aquí lo caballeresco poco a poco ha sido sustituido por lo canallesco (que ya ni siquiera picaresco). En otras palabras, que cuando de captar votos se trata, es aplicable ese dicho horrible de "donde dije digo, dije Diego", que en política viene a significar que si soy de izquierdas y me prometes gobierno, me hago de extrema derecha si hace falta.  
Pues ha llegado el día 2 de enero y nadie ha revocado la ley antitabaco (¡hip, hip, hurraaaaa!). Por primera vez en mucho tiempo tengo ganas de cenar, relajarme un ratito y... salir a un barecito a tomarme una copa. Sólo por ver. Sólo por saber si la gente se ha dado por aludida. Y por tomarme una copa a gusto, cojones, que llevo treinta y pico años sin hacerlo.
Me muero de ganas por tener a alguien a mi lado, encendiendo por inercia un cigarrito. Me pregunto cómo reaccionaré:
 -Eh, tú, que está prohibido fumar...
No, demasiado directo y prepotente.
 -Perdona, aquí no se puede fumar.
Nada, nada, demasiado apocado. Me comerían con sopas.
 -O apagas el cigarrillo o te fostio la cara.
Creo que no. Así puede que reciba yo lo mío por valiente.
 -Shhhhheeeeee, que por mucho menos que eso he demandado a gente.
Bah, me pondría a la altura de la Belén Esteban. Aunque por otro lado, a mí sí que me vendría bien un poco de reducción de nariz.
 -Como no apagues el cigarro se lo digo al camarero.
No, muy cobarde.
 -Pues se lo digo a mi madre.
Más cobarde aún.
 -Oye, si me das tu número de teléfono, haré como que no me importa que estás echándome el humo.
Ah, no va conmigo semejante flirteo.
Supongo que cuando llegue el momento, y dependiendo de la raza, sexo, religión, características físicas y demás del fumador, lo sabré.
Mientras tanto hay que reconocer que es éste un día histórico, y por ello dejo constancia en este mi/vuestro blog.
Feliz entrada de año.