lunes, 6 de abril de 2015

DE "DIOSES Y CORDEROS": EL CERCO

Pasando el ecuador del libro, "el cerco" es una historia narrada con un tono algo más distendido, a modo de postre tras una comida copiosa, en el que el protagonista es un policía del montón al que dan la difícil misión de sacar información al principal sospechoso de ser el autor de las desapariciones de varias chicas en los últimos meses: el psicópata sigiloso.
¿Y por qué le encargan a él semejante misión?
Porque el sospechoso es Juan Cañete, su mejor amigo de toda la vida y ahora también su vecino.
Os dejo un fragmento:


Revisé los nuevos informes que me había proporcionado el señor inspector, sorprendiéndome de que fueran tres los testigos que situaban a mi amigo Juan Cañete en la escena en la que se había visto por última vez a la chica desaparecida dos semanas atrás. El primero era un portero que lo reconoció entrando en el pub Iris, un lugar en el que jamás hubiera pensado que podría entrar alguien tan extraño e introvertido como él. El segundo era un camarero que lo recordaba solo, sentado con una copa en la barra y mirando con atención a cuanta chica pasaba por su lado, algo que tampoco me parecía propio de mi viejo colega de instituto. Por último, una de las amigas de la chica desaparecida afirmaba que habían sido perseguidas durante un trecho por un tipo joven cuya descripción coincidía alarmantemente con la ofrecida tanto por el portero como por el camarero. Después de varias pesquisas e interrogatorios, alguien había facilitado un nombre, convirtiendo al pobre de mi huraño amigo Juan en el principal sospechoso del caso más aterrador y misterioso que jamás se había producido en una ciudad pequeña y aburrida como la nuestra.

¿Será capaz de demostrar nuestro protagonista que su buen amigo es un don nadie incapaz de hacer daño a una mosca?
Eso es algo, querido lector, que tendrás que averiguar leyendo "Dioses y corderos". Y ojo con los personajes secundarios y con los escenarios en los que transcurre esta historia, pues igual nos los encontramos en otras historias.

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